hola~~ les traigo una pequeña parte de "para siempre" espero lo disfruten :D
~seis meses después~
- ¿Hee? - la sorpresa en el tono de Jiwon lo dejo congelado en su
lugar. Tenía ocho meses y ya no podía ocultar más su estado. Después de que
Siwon se fuera todo cambio para él. Su abuela había muerto y había tenido que
vender la casa para pagar los gastos del hospital y los gastos funerarios.
No podía pagar la matricula en la universidad y luego había
descubierto que los malestares eran porque estaba embarazado.
Su mundo giro de una forma en la que no había previsto. Y ahora
con Jiwon mirándole sorprendida de su prominente vientre a la cara todo parecía
seguir empeorando.
-sabía que eras un cualquiera, apenas mi hijo se fue te revolcaste
con otro ya estas premiado. – se rio con sorna el señor Choi.
Sabía que no debió ir a ese centro comercial, pero el antojo por
unas estúpidas galletas lo supero.
-señor Choi, Jiwon- respondió sonriendo mientras acariciaba
protector su vientre.
- ¿de cuánto estas? - pregunto rápido Jiwon mientras colocaba
cuidadosamente la mano sobre el vientre de Hee.
-ocho… ocho meses. –miro nervioso de Jiwon al señor Choi.
Si sus cuentas no fallaban y estaba segura de que no, ese bebé era
de su hermano. Miro sorprendida a Hee mientras este se despedía de forma
abrupta y nerviosa.
-maldito mocoso, ese era el amor que le decía tener a mi hijo…
-papá, has tus cuentas y te darás cuenta que ya tienes heredero
Choi. - escupió las palabras mientras seguía su camino, debía decirle a su
hermano.
El señor Choi miro sorprendido de Jiwon a la lejana silueta de
Hee. Eso no podía ser… su primer nieto y de ese.
Había quedado destrozado cuando Jiwon perdió a su primer heredero
por el cáncer, ella apenas y podía seguir con el tratamiento y ahora esto. Si
su hija moría sin un heredero perdería toda la herencia Park. Y se había
esforzado mucho por concertar ese matrimonio con el viejo. Si su hija moría sin
heredero de nada habría servido envenenar al viejo Park.
Hee sabía que el señor Choi no lo dejaría acercarse a Siwon, pero
no permitiría que tocara a su pequeño Siwan. Junto todo lo que tenía y se fue a
un pequeño pueblo lejos de todo y todos. Consiguió un trabajo en el único almacén
del lugar, la dueña lo dejo quedarse en el pequeño cuarto en su azotea.
Y en ese pequeño cuarto nació una viva imagen de Siwon con la
ligera diferencia de los ojos de Hee. Estaba feliz, no cabía duda. Solo tenía
que esperar al regreso de Siwon y los tres estarían juntos y felices.
*******
Lamentablemente para Heechul los planes del señor Choi eran otros.
Lo investigo, tenía que corroborar que ese niño era un Choi.
Una vez lo averiguo supo que tenía que tenerlo, ese niño seria la
respuesta a sus problemas.
Jiwon no respondía a los tratamientos y ya no sabía cómo mantener
en secreto su enfermedad y el aborto. El chico parecía haber desaparecido,
debía encontrarlo o perdería su empresa. Era todo lo que importaba.
Y justo cuando encontró una pista de Hee, Jiwon murió.
Sus planes se vieron gravemente alterados, Siwon quería volver,
los abogados querían conocer al heredero Park y su esposa tenía una crisis por
perder a su hija.
Por si fuera poco, Hee de nuevo había desaparecido.
Claro que como buen empresario el señor Choi aprovecho todo lo que
azotaba a su familia. Una semana después viajo a china con su esposa y el
montón de cobijas que la prensa pensó era su nieto. Tenía que planear como
obtener a su heredero.
****cuatro años después****
-vamos lindura… mírame…mírame mientras te follo…-jadea contra su
cuello un asqueroso hombre.
Hace mucho dejo de gritar, de pedir ayuda, de llorar y suplicar.
Prefería pensar que su cuerpo ya no era suyo, que estaba lejos con
su pequeño Siwan.
-maldita basura… quien diría que eres tan bueno en esto…- las
manos ásperas del viejo hombre lo tomaron por los brazos para ponerlo sobre la
silla de ruedas y llevarlo a las regaderas.
De nuevo había sido abusado por el asqueroso enfermero. Ya no recordaba
porque estaba ahí, no recordaba cuanto tiempo había pasado.
Llegaba al punto de solo querer morir.
-es una lástima, eres muy bonito para este lugar. Claro que muy
buena suerte para mí que puedo disfrutar de ti- después de limpiarlo con la
manguera lo llevo a su habitación, le puso el sedante y lo arrojo a su cuarto.
Abrazo sus piernas y escondió su maltratado rostro entre sus piernas,
el cabello largo lo cubría como un velo y por los escasos minutos de conciencia
que le dejaba el sedante pensó en el lindo y dulce rostro de su pequeño.
**************
“Siwon… Siwon ... me dejaste. Me olvidaste. Te odio.”
Despertó sudando una vez más, mira a su alrededor y frota su
rostro en un intento de olvidar ese mal sueño.
- ¿cuándo lo olvidaras? – So
Eun lo miro desde su lugar en la cama. - ¿dime hasta cuando debo seguir
compitiendo con un recuerdo? – no pudo evitar el tono dolido mientras se
levantaba y vestía. – es mejor que no me busques….
-So, lo lamento, desde un inicio te dije que…
-No, dijiste que lo intentarías – las lágrimas se agrupan en sus
ojos, sabe que es su culpa por ilusionarse con un hombre que ya tiene ocupado
el corazón.
No sabe que más decir, es verdad ni si quiera lo ha intentado. Jamás
la podrá amar como lo ama a él.
-lo lamento, no puedo o no quiero olvidarlo. - debía ser honesto
con ella y con el mismo, no podía dejar de pensar en Hee.
-lo sé, por eso lo mejor es que no volvamos a vernos. Adiós Siwon y
despídeme de Siwan. - la chica salió del departamento dispuesta a olvidar.
Una vez más se quedaba solo con sus recuerdos, con el dolor y
perdida. De nuevo miraría esa foto vieja del único dueño de su corazón.
*********
-tío Siwon!!- el pequeño Siwan salto a los brazos de Siwon tan pronto cruzo el umbral. El pequeño siempre lo hacía mejorar el
ánimo, lo miraba con una inocencia que solo había visto una vez…
- ¿qué pasa pequeño? - lo sostuvo entre sus brazos mientras
caminaba al recibidor.
-la señora mala me quito la foto de mi omma- comenzó a llorar el
pequeño cubriendo su carita con las pequeñas manos.
-ya te dije que no es tu omma, estas confundido. – la mujer guardo
la foto e ignorando a Siwon se dirigió al despacho del señor Choi.
-cariño aquí hay muchas fotos de tu omma, mira. – Siwon no podía alegar
contra la robusta señora Chen, eso implicaba discutir con su padre y prefería
pasar ese tiempo con su adorable sobrino.
-ella no es, mi omma es más…
- ¡basta con esto Siwan! – el señor Choi entro furioso a la habitación,
Siwon atino a esconder el rostro del pequeño en su cuello.
-papá basta, es solo un niño…
-no te metas Siwon, señora Chen llévese al niño a su habitación está
castigado. – el señor Choi ordeno.
Siwon no soltó al niño y lo apretó más contra el en un reflejo
protector.
-no papá, Siwan no hizo nada malo. Y no dejare que le hagas esto….
-dejen de pelear por favor – intervino la señora Choi sosteniéndose
de la pared- por favor cariño, Siwan solo extraña a su omma- dijo acariciando
la melena obscura y rizada del pequeño. - ¿verdad Siwan? - ante el asentimiento
de este la señora le extendió los brazos y lo sostuvo acariciando su espalda con
cariño.
-no deberías estar de pie, el medico dijo que debes estar en cama.
- el señor Choi, frio como siempre la tomo del brazo haciéndola dejar al niño
para llevarla a su habitación, Siwon intento detenerlo, pero un gesto de su
madre lo hizo quedarse consolando la pequeño.
Siwon sabía que las cosas eran muy extrañas, pero siempre que
intentaba indagar su padre se encargaba de frenar cualquier avance.
Sabía que mentía cuando le dijo que Hee había aceptado dinero para
desaparecer. Estaba asustado de que le hubiera hecho algo, pero era su padre no
un monstro sin corazón. Al menos eso era lo que quería pensar.
***********
La señora Choi se carcomía de remordimientos, se sabía culpable y cómplice
por callar por todos estos años las injusticias de su marido.
Había hecho sufrir a su hija, a su hijo, al pobre hijo de su mejor
amiga y ahora a su propio nieto.
No quería irse a la tumba con tantos remordimientos y culpas, debía
hablar con su hijo, contarle la verdad sobre Siwan y el paradero del joven Kim.
Mando llamara Siwon la mañana del sábado que murió, Siwan estaba
sentado junto a ella con la foto de Hee entre sus manitas.
Siwon entro con una sonrisa al ver al pequeño sonreír y mirar con
ternura y adoración la imagen. – hola mamá, hola campeón- sonrió sentándose
junto a Siwan mientras revolvía sus cabellos.
-Siwan, enséñale a tu omma a tu tío, el abuelo no está, anda yo te
doy permiso – susurro la mujer para alentar al niño.
La imagen era borrosa, pero Siwon sabía quién era, no era su
hermana, eso seguro y mucho menos una mujer.
Las facciones delicadas, los carnosos labios y esa mirada inocente
y risueña.
Era él, su Heechul.
-él es la omma de Siwan. Hijo, Siwan es tu hijo…- las manos de Siwon
temblaron mientras miraba de su madre a la foto y luego al pequeño que correspondía
como un reflejo su expresión de sorpresa. – hijo, debo decirte la verdad…